Ivonne Mansilla, jefe oficina SMA Región de Los Lagos. Foto: SMA Santiago.

Centros de cultivo concentran el 9,6% de expedientes de fiscalización en Chile

Chile: Entre los años 2013 y 2015, en la región de Los Lagos el  Sistema Nacional de Información de Fiscalización Ambiental (Snifa) registró 1.471 expedientes de fiscalización (9,6% del total nacional) relacionados con centros de cultivo de peces , solo el 6,4% de éstos terminó mediante un procedimiento sancionatorio. Las tres comunas con más expedientes fueron Puerto Montt (14,4%); Puerto Varas (13,6%) y Hualaihué (10,5%).

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La plataforma de registro de fiscalizaciones del Snifa en Chile, establece que entre el 2013 y el 2015, la región de Los Lagos concentró el 36,8% de los expedientes de fiscalización relacionados con el cultivo de peces en Chile. A nivel nacional, la Región de Los Lagos concentró la mayor cantidad de expedientes por región (16,5%), y el ítem "Pesca y Acuicultura", está a la cabeza del ranking, concentrando el 31,8% del total de expedientes.  En conversación con Salmonexpert, la seremi de Medio Ambiente de la región de Los Lagos, Ivonne Mansilla, comentó acerca de estas cifras.

Vemos que en la Región de Los Lagos, la mayor parte de los expedientes corresponden al área acuicultura, una industria que tiene más de 20 años en el país, ¿a qué se debe esto?

Hay una clara relación entre las actividades con más presencia en la región, sus fiscalizaciones y sanciones. Los Lagos es la zona que más concentra Resoluciones de Calificación Ambiental (RCA) aprobadas en el país, con más de 2.880 permisos. El sector pesca y acuicultura representa un 77% de las unidades fiscalizables para la SMA en este aspecto. En cuanto a sanciones, cerca del 60% de los sancionatorios se concentra en el área de pesca y salmones, en correlación a su alta presencia en número de RCA.

Este sector tiene complejidades especiales en su operación, pues trata con seres vivos, y nos hemos encontrado con malas prácticas que contravienen las RCA, como la ubicación de centros de cultivo, basura en playas y en el fondo marino, entre otras cosas. Todas estas conductas deben irse corrigiendo, y hemos visto que en los procedimientos sancionatorios los titulares están dispuestos a corregir.

¿Es difícil para las empresas cumplir con los requisitos ambientales mínimos, cómo percibe la evolución de esta materia en el área acuicultura?

Un punto importante a destacar es que las empresas deben ponerse al día con las exigencias que la autoridad ambiental les hace al momento de otorgar un permiso, pues ese cumplimiento redunda en menores impactos al medio ambiente y la salud de las personas, y finalmente ese es el objetivo de la SMA. Ojalá no tuviéramos que cursar sanciones, sino ir verificando siempre cumplimientos de alto estándar en todos los sectores productivos regulados.

A nivel de evolución, preferiría no profundizar, ya que la SMA sólo tiene tres años de funcionamiento y es muy temprano para hablar de evolución.

Hemos estado realizando talleres y charlas al sector.

¿A su juicio, son las multas un instrumento de persuasión suficiente para las compañías, o hay otros elementos importantes, tales como las "licencias sociales" para operar?

Las multas son un instrumento previsto en la ley y que busca disuadir a los titulares de proyectos de cometer infracciones. No obstante, nuestra ley también permite la presentación de Programas de Cumplimiento cuando se inicia un procedimiento sancionatorio con una Formulación de cargos. Estos son un plan de acciones y metas presentado por el infractor, para que dentro de un plazo fijado por la Superintendencia, el titular cumpla sus obligaciones ambientales.

Si la SMA aprueba dicho programa, la empresa se obliga a ejecutar nuevas obras y acciones que van en directo beneficio del medio ambiente y la salud de las personas. Las multas en cambio, no atacan el fondo de los problemas, y su monto va al erario fiscal.

La mayoría de los sancionatorios contra salmoneicultoras están con Programas de Cumplimiento en distintas etapas (en ejecución, análisis o ya finalizados).

Vemos que la mayoría de los expedientes (95,2%) terminan sin procedimiento sancionatorio ¿a qué se debe esto?

Al revisar las cifras de fiscalizaciones, podrá ver que existen más de 2.400 expedientes relacionados a normas de emisión. Estas se refieren específicamente a temas de Residuos Industriales Líquidos (RILES), que están contemplados en los D.S. 90 y D.S 46. En esta materia, las empresas remiten informes y nosotros los procesamos computacionalmente, por lo que existe un alto número de fiscalizaciones. Efectivamente, en esta materia, el cumplimiento ambiental es alto, ya que son normas más antiguas y que las empresas están acostumbradas a reportar.

No es la misma realidad con el cumplimiento en materia de RCA, donde tenemos un mayor número de sanciones versus fiscalizaciones.

Revise la página estadística del Sistema Nacional de Información de Fiscalización Ambiental (Snifa)