Grupo Indura cuenta sus planes para la salmonicultura chilena

“El gran esfuerzo que realizaron las salmonicultoras en Chile, post crisis del virus ISA, está hoy dando frutos, lo que fue empujado también por regulaciones adecuadas”. Con estas palabras, que reflejan el positivo momento de la industria local, comienza su entrevista con Salmonexpert el subgerente del Negocio Acuícola de Indura, Fernando Sáenz-Laguna.

El ejecutivo de la empresa proveedora de oxigenación para la salmonicultura afirma que “crecemos al mismo ritmo del sector nacional y actualmente, sentimos la fortaleza que ha tomado, entrando a un período de estabilidad que está para quedarse, ciertamente. Evidentemente, acá hablamos de seres vivos y podrían surgir imponderables naturales, pero la industria está más preparada para enfrentar un evento de ese tipo, lo que acompaña a sus buenas prácticas productivas”.

En medio del boyante escenario sanitario y financiero de la salmonicultura chilena, ¿Indura está abordando más áreas de servicio para el sector?

Nuestro servicio para apoyar el crecimiento de la salmonicultura, que es la oxigenación, siempre se enfocaba en agua dulce, pero hemos estado abordando más fuertemente la producción en mar, en las balsas jaulas, lo que ya lleva aproximadamente cuatro años operando exitosamente.

Cabe destacar que las dos áreas se están expandiendo, y en el caso de agua dulce, cada operación nueva que aparece es principalmente una piscicultura de recirculación que busca la sustentabilidad ambiental y demanda una mayor cantidad de oxígeno para crecer.

Lo anterior, dado que es necesario optimizar el uso del agua dulce por su menor disponibilidad y eso impulsa a que los nuevos proyectos en esta área sean, en mayoría, pisciculturas de recirculación, que requieren más inversión, la cual está materializándose.

Considerando que están abordando ambas áreas del salmón, ¿no les golpeará negativamente la nueva normativa que permitirá que los reproductores vuelvan al mar?

Se abrió la posibilidad de que los reproductores vuelvan al mar y las empresas que quieran hacerlo, tendrán que tomar las precauciones correspondientes para evitar problemas sanitarios. Para tal efecto, los centros deberán ser más tecnificados y creemos que requerirán de nuestros servicios de oxigenación, por lo que esta normativa no nos afecta negativamente, para nada.

En otro tema, ¿la consolidación vía fusiones y adquisiciones de la industria, es un desafío o es un beneficio para ustedes, como empresa proveedora de la salmonicultura?

La consolidación es un beneficio, pues indica que los resultados esperados para la industria chilena del salmón son más ciertos y sólidos. Uno como proveedor debe adaptarse a esta realidad, que es de crecimiento y, por cierto, acompañarla debidamente.

¿El cambio climático ha impulsado cambios en la forma de entrega de sus servicios de oxigenación para el sector, tomando en cuenta las más altas temperaturas del agua?

Sí, la realidad ambiental de la salmonicultura es un desafío para nosotros, pues han aumentado las temperaturas en agua dulce con el cambio climático y eso nos exige llegar, como siempre, de forma oportuna donde nuestros clientes con oxigenación.

Cualquier cambio medioambiental puede afectar a los salmones y ante eso, debemos estar todos alerta, para resolver estos problemas adecuadamente y que los peces que se vendan se encuentren en buena calidad de cara a los consumidores.