En Chile, los frigoríficos han estado en su capacidad máxima, por el mayor almacenamiento de salmón. Foto: Friopacífico.

Industria chilena almacena 50 mil toneladas de salmón por desaceleración

Chile: La disminuida demanda por salmón chileno fresco a causa de la pandemia ha hecho que, incluso, se almacene producto nacional en frigoríficos de Argentina, específicamente en Mendoza.

Primero fue el estallido social y luego la pandemia del Coronavirus. Ambos factores han generado importantes desafíos de mercado para la industria chilena del salmón donde, según un reporte financiero de Nordea Bank, el sector nacional ha debido almacenar entre 40 mil y 50 mil toneladas de peces en los últimos cinco meses. 

“Durante marzo, la demanda de salmón a nivel mundial ha caído significativamente a medida que los grandes mercados en Europa y América del Norte, pero también los mercados locales en América del Sur han impuesto restricciones severas, que incluyen restaurantes cerrados y una disminución significativa en otros segmentos de Horeca”, admite Nordea Bank en su informe.

Lo anterior, permitió que se elevara el consumo de porciones congeladas en supermercados. El último reporte muestra que la alta tasa de salmón del Atlántico chileno continuó en febrero de este año. En los primeros dos meses de 2020, se cosecharon 23.400 toneladas más que en el mismo período de 2019, con un crecimiento del 23% para la especie, de acuerdo con Nordea Bank.

“Si observamos las cifras de exportación de salmón chileno hasta enero de este año e incluimos nuestras estimaciones para febrero de 2020, son significativamente más bajas que la producción. Esto se debe tanto a los desafíos de acceso al mercado para Rusia como a la desaceleración en Asia como resultado de Covid-19”, asegura Nordea Bank.

Sin embargo, es positivo, según Nordea Bank, que la biomasa en el mar en Chile ahora se haya reducido a aproximadamente el mismo nivel que hace un año, mientras que a inicios de 2020 fue de 5% a 10% más alta. “Esto proporciona una mejor flexibilidad para la absorción de peces. Además, vemos una disminución en la exposición a los smolts (9%) en enero-febrero del ejercicio en curso”.

Sector resiliente

Rogelio Busto, Sales Reefer Área Chile de Hapag Lloyd.

Frente a esta situación, el director Sales Reefer Área Chile de Hapag Lloyd, Rogelio Busto, señala a Salmonexpert que, en base a reuniones con sus clientes de la industria salmonicultora, “podemos entender que el escenario para este año será desafiante. Sabemos que los niveles de producto congelado en los frigoríficos han venido creciendo a niveles que no se observaban desde el 2015, los cuales pueden verse aumentados por efecto del Covid-19, principalmente porque se espera una baja en la demanda del salmón fresco”. 

Por otra parte, apunta Busto, “en algún momento las plantas de proceso, al igual que sucede en las otras industrias, enfrentarán posiblemente problemas de productividad, a causa de las adecuadas medidas para evitar contagios al interior de éstas. No obstante, el salmonicultor es un sector resiliente, que ha pasado por varias crisis en los últimos años como el virus ISA, bloom de algas, por dar ejemplos y, por lo tanto, creemos que podrán manejar bien el impacto del Covid-19”.

En aviones de pasajeros sólo con carga

De izquierda a derecha: Steve Dichter, CEO de Agility USA; Thomas Otersen, CEO Agility Chile; Rainer Grob, Consultor Área Perecederos Agility Chile.

Y si para los productores de salmón y los trabajadores del sector no ha sido fácil en el marco de la incertidumbre por la pandemia del Covid-19, la industria logística también enfrenta dificultades, donde, por ejemplo, en la isla de Chiloé las comunidades no permitieron ni entrar ni salir camiones para transporte de carga, evaluándose como alternativa embarcaciones. 

El Consultor del Área de Perecederos de la empresa Agility Chile, Rainer Grob, cuenta a Salmonexpert que se han debido implementar herramientas que antes no existían: vuelos chárteres y en aviones de pasajeros, pero sólo con carga, servicios especiales en frigoríficos -incluso en el norte de Chile, en ciudades como La Serena, y más allá de las fronteras en Argentina, en Mendoza específicamente- y liberación de contenedores reefer. Todo esto, a mayores costos.

“Han sido innumerables horas de coordinación y negociación para ajustar los valores de mercado a las nuevas necesidades y a la disponibilidad existente. Fundamental es el trabajo efectuado para digitalizar todo el proceso, entregando soluciones en línea de tracking & tracing de los envíos del cliente”, detalla Grob.