Foto referencial de centro de cultivo. Fuente: Archivo Salmonexpert.

Sernapesca destaca la mejora del manejo sanitario en la salmonicultura

Chile: La entidad gubernamental recalcó que, en relación con las enfermedades, Chile tiene el mejor estatus comparado con los otros países productores de salmón.

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El informe sanitario de salmonicultura de 2016 elaborado por el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca), dejó de manifiesto la mejora en el manejo sanitario en el sector acuícola nacional. El estudio, que utilizó información de empresas, laboratorios de diagnóstico y datos del propio organismo, mostró un avance en el tratamiento de Anemia Infecciosa del Salmón (ISAv). Así, se presentaron dos brotes de dicha enfermedad, lo que se tradujo en una caída de 50% respecto de aquellos detectados en 2015. Ambos brotes fueron descubiertos en la Región de Aysén y se circunscribieron en la misma macrozona.

La subdirectora de Acuicultura de Sernapesca, Alicia Gallardo, comentó que "esto ratifica el control exitoso de esta enfermedad que Chile ha mantenido con un enfoque preventivo. Esto se puede corroborar respecto a Noruega, que para el mismo año registró 12 casos en comparación con los tres que tuvo Chile, de los cuales solo dos fueron brotes".

Agregó que "desde la condición de las enfermedades virales que la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE, por sus siglas en inglés) considera importantes para el comercio, Chile tiene el mejor estatus comparado con los otros países productores de salmón".

En cuanto a la caligidosis el informe destacó que esta se mantuvo bajo control en 2016. En tanto, en relación con la piscirickettsiosis, la enfermedad continúa manteniendo una tendencia estacional.

Gallardo recalcó que "la condición sanitaria de la salmonicultura en Chile destaca frente a Noruega, en especial respecto de la ocurrencia de casos de enfermedades de alto impacto económico y sanitario, particularmente de alfavirus, que ha tenido un aumento explosivo de los casos reportados por Noruega a la OIE, con 62 en 2015 y 138 casos en 2016, versus ninguno en Chile.

Lea la nota original en El Mercurio