Un nuevo problema sanitario

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Por Christian Pérez Mallea

Todavía hay más incertidumbres que certezas respecto de esta enfermedad, al punto que el nombre que le asignó el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) es el de Síndrome *Idiopático de la Trucha (SIT). Entre los nombres que recibió anteriormente, se encuentran Síndrome Anémico y Anasarquico de la Trucha Arcoíris o SAAT, y Síndrome de hematomas y ruptura hepática en trucha arcoíris, ambos atribuidos por laboratorios de diagnóstico especializados en patologías que afectan a los salmónidos.

Sernapesca afirma que -en el ámbito de la vigilancia preventiva de enfermedades que afectan a la salmonicultura- en septiembre del 2012 comenzó a evidenciarse la presencia de “hallazgos clínicos que no se habían descrito anteriormente”, para trucha en centros ubicados en la Región de Los Lagos.

Luego de ello, Sernapesca ha organizado y generado variadas acciones tendientes a la comunicación y entrega de información, implementación de una vigilancia sanitaria específica en los centros con cultivo de trucha, así como también la ejecución de investigaciones científicas con carácter oficial, que han abarcado ámbitos como: estudios epidemiológicos, análisis de técnicas diagnósticas de laboratorio y descripción de la signología clínica de la enfermedad.

1El adjetivo idiopático significa “una enfermedad de etiología desconocida”.

Ocurrencia El SIT ha sido descrito principalmente en la ACS 1, correspondiente a la zona geográfica del Estuario de Reloncaví, en la Región de los Lagos. No obstante, también se han registrado casos esporádicos en Hornopirén, Chiloé central y el Fiordo Reñihué. Aparentemente, no se habría reportado aún desde las regiones de Aysén y Magallanes.

De acuerdo con lo explicado por el Médico Veterinario de una empresa salmonicultora nacional que ha enfrentado brotes de SIT, ésta suele afectar inicialmente a los ejemplares más grandes en los planteles de engorda sin presentar signología aparente, para luego empezar a observarse en peces de otros tamaños, evidenciando signología. El especialista de otra compañía productora agregó que esta enfermedad es bastante estacional y asociada con el alza de temperaturas en primavera. Además, dijo que los casos reportados son más frecuentes después de manejos y fuertes episodios de stress.

A su vez, Sernapesca detalló que el SIT se presenta en peces de una condición productiva robusta, entre los 400 y 2.500 gr de peso. Además, el Servicio ha descartado, a través de resultados de análisis de laboratorio oficiales, tanto en laboratorios de diagnósticos de nivel nacional como internacional, que la causa primaria de este síndrome sea un agente infeccioso exótico de la Lista 1 de Enfermedades de Alto Riesgo (EAR), de la Organización Internacional de Epizootías (OIE).

Patología macroscópica interna y externa De acuerdo con lo observado y registrado por médicos veterinarios del Sernapesca, la principal signología clínica que presenta esta patología corresponde a: abdomen abultado, exoftalmia bilateral, ano hemorrágico protruido, ascitis serosanguinolenta, coágulos y hemorragias sobre hígado y grasa visceral e hidropericardio, hallazgos que se relacionan con antecedentes reportados por laboratorios de diagnóstico ictiopatológico del país.

Asimismo, según lo relatado por varios médicos veterinarios de empresas salmonicultoras nacionales, esta condición también se caracteriza por presencia de edema cutáneo con sobrelevantamiento de escamas, hemorragias en la cavidad abdominal, hematomas hepáticos, baja en el hematocrito, hemopericardio, líquido e inflamación de la vejiga natatoria, hepatomegalia, hemorragia en branquias, renomegalia y alteración del comportamiento natatorio, observándose un nado más letárgico y superficial comparado con peces sanos o con aquellos afectados por Piscirickettsiosis (SRS).

Al ser consultada respecto del tema, la médico veterinario e investigadora del Departamento de Salud de Peces y Moluscos del Instituto Veterinario de Noruega, NVI, Anne Berit Olsen, comentó que los signos clínicos descritos son consistentes con un disturbio circulatorio generalizado, el que podría responder a diferentes causas.

Etiología y mortalidad asociada La causa o etiología de la enfermedad es todavía una incógnita. Sernapesca descartó que se tratase de una patología listada como EAR 1. No obstante, podría tratarse de otro tipo de enfermedad infecciosa e incluso carencial y/o de origen ambiental.

De hecho, una de las primeras hipótesis asociadas con la etiología de esta enfermedad fue que se trataba de una intoxicación por metales pesados, debido a las altas concentraciones de cobre encontradas en varios órganos internos. Sin embargo, dicha teoría ya ha sido desechada.

Entre otras acciones infructuosas por detener las mortalidades provocadas por SIT, algunos productores optaron por realizar tratamientos antimicrobianos en los planteles afectados, sin conseguir reducir las pérdidas. Esta evidencia, reforzaría la idea de que no se trata de un agente bacteriano.

Según el Informe Sanitario de Salmonicultura en centros marinos del primer semestre 2014 elaborado por el Sernapesca, el 34,7% de las mortalidades en trucha durante el período correspondieron a causa “Secundaria”. Mientras que para el caso de la clasificación “Secundaria”, SRS abarca el 76,4% de esta mortalidad, seguido por “Otras” con un 19,2% de la mortalidad clasificada, del cual un alto porcentaje corresponde a SIT.

Además de provocar mortalidad (en rangos que presentarían gran dispersión), SIT predispondría a los peces frente a brotes de SRS, de acuerdo con lo relatado por varios Médicos Veterinarios de empresas salmonicultoras.

Entre otras estrategias aplicadas para reducir el impacto de esta enfermedad, cuando los peces aún no pueden ser cosechados por no haber cumplido con el período de resguardo o “carencia”, algunas empresas han optado por bajar la tasa de alimentación, mientras otras compañías se han decidido por reducir aún más el ritmo metabólico de los peces a través de ayuno, por 10-15 días.

En el intertanto, el Sernapesca mantiene una vigilancia continua de la situación sanitaria en la especie, a través de: la fiscalización, exámenes de necropsia y toma de muestra en terreno y, vigilancia de la magnitud, clasificación y evolución de las mortalidades. Así también, se encuentra desarrollando otras investigaciones oficiales, con investigadores pertenecientes a universidades nacionales, laboratorios de la red de Sernapesca y laboratorios de referencia mundial, para determinar la(s) causa(s) de esta enfermedad y los factores de riesgo asociados.