Fotografía de Alex Muñoz | National Geographic.

Expedición National Geographic muestra preocupación por salmonicultura en Magallanes

Chile: A través del programa Pristine Seas, se recomienda que el gobierno de Chile no apruebe ninguna nueva solicitud para el cultivo de peces, dentro de la recién creada Reserva Nacional Kawésqar. 

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A comienzos del 2020, National Geographic, a través de su programa Pristine Seas, realizó una expedición inédita en la Reserva Nacional Kawésqar en la región de Magallanes, en la que por primera vez se integró a los equipos de científicos y documentalistas, representantes de las comunidades Kawésqar por la Defensa del Mar y la Comunidad Indígena Yagán de la Bahía de Mejillones. En total fueron tres semanas de navegación en las que participaron 14 personas. Entre los meses de julio y septiembre de ese año, la comunidad Kawésqar realizó una segunda expedición aplicando un enfoque biocultural.

El primer viaje duró 21 días y partió en Punta Arenas. Recorrieron el Estrecho de Magallanes, el Parque Marino Carlos III, toda la reserva Kawésqar hasta llegar a la isla Madre de Dios, al sur del golfo de Penas y que busca ser el primer Patrimonio de la Humanidad Natural de Chile por la Unesco.

Algunos de los que asistieron aseguran que “fue una expedición sorprendente no sólo por la rica y variada biodiversidad que se logró registrar -que cambiaba según la salinidad y temperatura de los distintos fiordos- sino también por la gran cantidad de jaulas salmonicultoras que se avistaron”, según publica La Tercera.

Leticia Caro es miembro de las comunidades Kawésqar por la Defensa del Mar -donde están integradas las comunidades Ata’p, Residentes en Río Primero, Inés Caro y Grupos Familiares Nómades del Mar- y participó en el viaje junto a NatGeo. Cuenta que, para su pueblo, el territorio es mucho más que eso: representa espiritualidad, residencia e interacción. De ahí, señala, que resguardarlo sea una cuestión imperante hoy en día.

La parte marina del lugar está dividida en dos grandes porciones: el Málte, costa exterior, y el Jáutok, canales interiores. Estos se diferencian por el tipo de marea y las especies que habitan allí, aunque también hay una carga espiritual en cada uno de ellos.

La expedición a cargo de National Geographic tuvo como resultado un informe y un documental que se estrenará en los próximos meses. En el documento se recomienda que “las medidas de conservación que se adopten respeten la unidad del territorio ancestral, en el que no se reconocen divisiones entre el mar y la tierra. Además, llaman a que el gobierno de Chile no apruebe ninguna nueva solicitud para el cultivo de salmón dentro de la recién creada reserva nacional y que paralelamente se remuevan las que actualmente operan en esta área protegida”.

Para Álex Muñoz, director para América Latina de National Geographic Pristine Seas, el motivo de las recomendaciones se basan en que la reserva alberga un ecosistema único e irremplazable y que en gran parte se encuentra en estado prístino. Sin embargo, en algunas partes ya está siendo fuertemente afectado por la presencia de centros de cultivo que arrojan grandes cantidades de contaminación al mar. Además, sostiene, se pone en riesgo las especies nativas por posibles escapes y enfermedades.

Durante la navegación, dice Muñoz, “nos sorprendió ver salmoneras en lugares de gran importancia ecológica pero que ahora estaban invadidos por tremendas jaulas con miles de salmones adentro. Sabemos que estas jaulas arrojan una gran cantidad de desechos al mar y también dejan escapar una cantidad importante de salmones. A simple vista, uno se impresiona de ver estos centros en lugares que en cualquier otra parte del mundo, serían declarados parques nacionales sin actividades de alto impacto ambiental”.