Tribunal rechaza demanda laboral de ex ejecutivo contra Australis Seafoods

Imagen referencial de Australis Seafoods.

Santiago Garretón solicitó el pago de la suma de $841.769.308, sin embargo, la justicia solamente le concedió $10.132.841, por concepto de vacaciones pendientes.

Publicado Actualizado

Un revés judicial sufrió el ex gerente de Administración y Finanzas de Australis Seafoods y hombre de confianza de Isidoro Quiroga -según comunicado de prensa enviado por los abogados-, Santiago Garretón, luego de que el Segundo Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago dictara sentencia y rechazara la demanda interpuesta por el profesional en contra de la compañía, acusando que su desvinculación -fundada en un incumplimiento grave de sus obligaciones laborales- había sido injustificada.

En su demanda laboral, “Santiago Garretón solicitó el pago de la suma de $841.769.308, sin embargo, el tribunal solamente le concedió $10.132.841, por concepto de vacaciones pendientes, lo cual ratifica lo desmedido de la pretensión de la demanda así como la contundencia de las defensas opuestas”, detalla Fernando Santibáñez, socio de CS Abogados y representante de Australis en este caso.

Garretón se encuentra querellado por administración desleal en el marco del caso Australis, el fraude más grande del que se tenga registro en la historia empresarial de Chile. “En esta causa, el fundamento de la querella está directamente vinculado con la discusión planteada ante el tribunal laboral, pues la administración desleal se funda en la violación de los directores y ejecutivos de sus deberes fiduciarios con Australis”, afirma el abogado Jorge Bofill, socio del Estudio Bofill, Escobar, Silva.

De esta manera, Santiago Garretón sufrió una derrota judicial, indican en el comunicado de prensa de los abogados, pues la resolución del tribunal desestimó lo reclamado por el ex ejecutivo de Australis, incluida la demanda por despido injustificado y la demanda reconvencional. El juez determinó que los antecedentes presentados por Australis fueron suficientes para acreditar la causal de despido y que Garretón incumplió gravemente sus obligaciones contractuales para con la empresa, una vez que la compañía fue adquirida por la transnacional china Joyvio.

“Es muy destacable lo preciso y detallado de la sentencia, que analizó todas las pruebas rendidas con relación a las pretensiones de la demanda y las desestimó una a una, ratificando que las conductas descritas en la carta de despido son graves y que no pueden ser aceptadas en el desarrollo normal de una relación laboral”, indica el abogado Fernando Santibáñez.

Según se precisa en el fallo, “atendida la naturaleza del cargo que cumplía el demandante (Santiago Garretón), mientras era gerente de Administración y Finanzas, debió actuar con el máximo apego a las normas contractuales, legales y reglamentarias, puesto que al prestar servicios teniendo a su cargo información sensible de la empresa, motivó el acceso a los sistemas de la compañía a una persona (Ricardo Misraji, ex gerente general de Australis) que no tenía vínculo alguno con ésta, vulnerando con ello la integridad de los sistemas y la confidencialidad de la información, lo cual implica, sin lugar a dudas, un incumplimiento grave de las obligaciones del contrato”.

Lo anterior hace referencia a la orden interna que dio Santiago Garretón para que Misraji, una vez que había renunciado a Australis, continuara teniendo acceso a su correo corporativo y, por ende, a información confidencial de la empresa. De acuerdo con el fallo, “durante la segunda semana de septiembre (2022), se confirmó que el señor Garretón, sin conocimiento, ni mucho menos consentimiento de parte de su superior jerárquico, quién suscribe, y contraviniendo las decisiones sobre la materia, instruyó al subgerente de TI reactivar la cuenta de correo de don Ricardo Misraji, pese a que la instrucción por parte de su representada había sido su desactivación, situación que se mantuvo desde el 15 de julio en adelante, sin conocimiento de su parte”. 

“Las conductas de Garretón que motivaron su despido ocurrieron en la misma época en que Misraji había exigido a Isidoro Quiroga el pago de los montos a que este se había comprometido en 2019, para que siguiera velando por sus intereses, desde su posición en Australis”, explica Jorge Bofill.