Mujer trabajando en centro de cultivo de Cermaq Chile. Foto: Consejo del Salmón.

Salmonicultura: Alta participación femenina en plantas, pero menor en centros

Chile: Cerca del 45% del empleo en plantas de proceso de salmón está compuesto por mujeres, pero el desafío continúa en centros de cultivo y en puestos de liderazgo, donde se avanza poco a poco.

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Según información de las empresas socias del Consejo del Salmón, el empleo femenino alcanza poco más de un tercio del total de colaboradores directos, aunque en las plantas de proceso -que representan la fase productiva más intensiva en mano de obra-, el empleo femenino es cerca del 45% del empleo. 

“Si bien hay una presencia más marcada de mujeres en plantas de proceso y puesto administrativos, en los últimos años se ha visto un aumento significativo de presencia femenina en áreas productivas de agua dulce y agua mar, así como en puestos de liderazgo”, afirma Jorge Lira, director de Estudios del Consejo del Salmón.

De acuerdo con Lira, las empresas están impulsando distintas acciones para seguir avanzando en esta línea ya sea con iniciativas internas o en alianza con otras organizaciones. “Nuestra empresa socia Australis está adherida a la Iniciativa de Paridad de Género que lidera Banco Interamericano de Desarrollo, el Foro Económico Mundial y el Ministerio de la Mujer con el objetivo de transformar, sostenidamente, los contextos que perpetúan las brechas económicas de género en nuestro país, además de promover la participación y el progreso de las mujeres en el mundo del trabajo”.

Con todo, Joanna Davidovich, directora ejecutiva del Consejo del Salmón, sostiene que es necesario promover una agenda con políticas que permitan dar un nuevo impulso al empleo femenino y que así “las mujeres puedan desarrollar sus talentos y trabajar, y de esa forma tener mayor autonomía económica y desarrollo integral”. 

“Chile había avanzado mucho en sus índices de participación laboral femenina en las últimas décadas, pero debido a las restricciones por la pandemia, hubo un retroceso relevante que aún no ha podido revertirse completamente”, admite Davidovich al respecto.

Marcela Bravo, jefa de proyectos de SalmonChile, manifiesta que si bien la salmonicultura fue una de las primeras actividades en incorporar a las mujeres en el mundo laboral, “y en sus 40 años de existencia se ha avanzado en materia de incorporación femenina, sabemos que tenemos que ir más allá y hemos estado trabajando junto a las empresas productoras y proveedores con quienes hemos realizado diagnósticos y definido áreas de trabajo que tienen como objetivo construir y avanzar de manera sostenible en una industria inclusiva, equitativa y con igualdad de oportunidades”.

“Este mes, más de 15 empresas de la industria salmonicultora firmarán un compromiso público con 10 objetivos que tienen que ver con un cambio cultural en las personas y la organización, generar ambientes y condiciones laborales que permitan conciliar la vida laboral, personal y familiar, aumentar la participación femenina en roles de liderazgo y también trabajar estos temas en las comunidades donde nos encontramos”, revela Bravo.