Centro de cultivo. Foto: Daniella Balin, Salmonexpert.

Análisis y efectos de la modificación al score de riesgo individual

Chile: La empresa Indexsalmon analizó las principales modificaciones que fueron incorporadas por el D.S. N° 186 del 2015, al Reglamento de Medidas de Protección, control y Erradicación de enfermedades de Alto Riesgo Sanitario para las especies hidrobiológicas (RESA), publicado en el Diario Oficial el 4 de mayo del 2016, en conjunto con las modificaciones introducidas por la Resolución Exenta N° 1553 del 2016, ambas en relación a su efecto en el score de riesgo individual de los centros de engorda de salmones.

Publicado Actualizado

En un reciente informe, la empresa Indexsalmon estudió las modificaciones introducidas por la Resolución Exenta 1553 de mayo del 2016 (RE 1553-2016), a la Resolución Exenta 1503 del 2013 (RE 1503-2013), que estableció los tramos de clasificación, el porcentaje de reducción de siembra de los centros de cultivo y fijó porcentajes y ponderaciones de los elementos que componen la clasificación de las agrupaciones de concesiones.

La Resolución Exenta N° 1553-2016, incorpora dos profundos cambios a la Resolución Exenta 1503-2013. Uno de ellos, tiene que ver con la clasificación de bioseguridad/score de riesgo para centros de cultivos, según lo señalado en el Art. 24 A del RESA. En tanto, la segunda modificación se relaciona con las variables en que se sustenta la determinación del score de bioseguridad de las Agrupaciones de Concesiones para Salmónidos (ACS), para el cálculo de densidad de cultivo.

Clasificación de bioseguridad/score de riesgo

“Dentro de la primera modificación se entiende que los tramos de pérdida se ven disminuidos por cada categoría o clasificación. Por ejemplo, el tramo de clasificación alta, que antes de la modificación variaba entre un 0-15% de las pérdidas, bajo este nuevo esquema (modificación), varía entre un 0-10%. Asimismo, los demás tramos se ven modificados a rangos inferiores de pérdidas”, explicó el gerente general de Indexsalmon, Reinaldo Vidal.

De este modo, los centros de cultivos podrían verse afectados en virtud del rango en sus nuevos tramos. Pero, a juicio de Vidal, esto no es tan efectivo. Al analizar esta modificación en conjunto con las relativas al RESA, para los efectos de cómputos de pérdidas, existen o se incorporan otro tipo de mortalidades que no pasan a computarse como pérdidas (hasta 5% por concepto de desdoble; Art. 24 RESA), por lo que, como primer antecedente, se debe entender que no toda mortalidad es pérdida, pero si toda pérdida es mortalidad.

Vidal explicó que antes de la modificación existían ciertas mortalidades que se computaban como pérdidas, como es el caso del desdoble y la relativa a la diferencia que generaba el contador de peces al momento de la siembra, ya que, el total de individuos contabilizados como pérdida, se restaban a número total de siembra, sin descuento de contadores. “Así, el descuento de individuos asociados con las pérdidas, ahora se descuenta después del conteo, es decir, al número entero de siembra, se le resta un 2% asociado a error de contadores, a lo que se suma hasta el 5% por efecto de desdoble”, reveló el especialista.

“En este sentido, entendemos que existía hasta un 7% que se computaba como pérdida, antes de la modificación al RESA y que, tras ésta modificación, no se computa como pérdida. Al asociar este hecho con la disminución en el tramo alta, que bajó cinco puntos porcentuales en su rango superior del tramo, no debiera incidir respecto de la incorporación de estas mortalidades que hoy no se reputan pérdidas”, afirmó el ejecutivo.

“En consecuencia, lo que baja la nueva tabla se aumenta vía RESA bajo el concepto de mortalidad y no de pérdida y, de esta misma forma, para los demás tramos”, advirtió el representante de Indexsalmon. Además, agregó que, la modificación 1553-2016, no representa mayores cambios, pero si cree que bajo la nueva tabla deberían existir menores centros clasificados en 'baja 1' y 'baja 2' que, en la tabla anterior, como en los demás tramos, producto de las modificaciones RESA.

Principales efectos en términos productivos y de bioseguridad

Según Vidal, cada modificación genera un efecto. ”El punto aquí es determinar cuáles son los efectos asociados con el score de riesgo, en suma con los cambios al RESA, los cuales se vinculan, fundamentalmente, con que, aquellas mortalidades que se computaban como pérdidas, hoy ya no lo son. Con ello, los Centros de Engorda de Salmónidos (CES) presentarán una disminución en su número, en los distintos tramos y/o clasificación, en donde la clasificación baja resultaría menos probable que en el escenario previo a la modificación”, destacó el especialista.

“Ello, aun cuando los umbrales mínimos y máximo por cada tramo hayan presentado variaciones hacia valores menores, son compensados con las mortalidades que hoy no se reputan como pérdidas. Cabe recordar que la normativa vigente (Ley General de Pesca y Acuicultura), establece una sanción de suspensión de operaciones (Art. 118 quinquies) por el plazo de dos años y eventual caducidad (Letra m) del Art. 142) respecto de CES con score de riesgo baja”, agregó Vidal.

“Desde la aplicación de la presente norma, el año 2013, estamos seguros y convencidos que sus efectos han ido generando efectos lentamente. Hoy, la industria casi en su totalidad se encuentra evaluada en relación a sus CES, hecho que les ha generado un nuevo problema, ya que han visto disminuidas sus siembras producto de esta clasificación. Para los casos que así ocurrió, aquellos deltas productivos y las contracciones productivas a las que se han visto expuestos, ha hecho que las empresas hayan activado nuevos centros dentro de sus programas de siembra, con el fin de poder mantener esa demanda en biomasa por año, frente a las reducciones que puedan presentar sus CES producto del score de riesgo”, reveló el ejecutivo.

Efectos en las empresas

De esta manera, resulta importante, para las empresas conocer y poder determinar sus tasas de recambio de concesiones, con el fin de poder dar la debida continuidad a sus operaciones. “Aquellas empresas consideradas medianas y pequeñas en activos de concesiones o centros de cultivos, serán las primeras en resentirse por esta contracción, y deberán buscar en el arriendo, nuevas concesiones para poder sustentar su producción, en la medida que sus concesiones descansen y vuelvan a una producción normal, con el fin de evitar la reducción de siembra”, aseguró Vidal.

En tanto, añadió que las empresas consideradas “grandes”, a propósito de su patrimonio en concesiones, serán quienes podrán absorber de mejor manera sus deltas o contracciones productivas, como efecto del score de riesgo, pero ello en la medida que sus concesiones pertenezcan al grupo de concesiones cuya aptitud así lo permita, bajo el modelo de rotación de concesiones.

“Es por ello que, dentro de nuestros servicios, hemos desarrollado herramientas estadísticas y matemáticas que nos permiten evaluar empresas o compañías en el tiempo, bajo el actual modelo productivo, en diferentes escenarios, como también lograr determinar las tasas de recambio, análisis de contracción productiva, entre otros”, finalizó el gerente de Indexsalmon.

Para mayor detalle de los cambios asociados con esta nueva modificación revise el informe completo de Indexsalmon aquí.