Auspicioso escenario para la industria salmonicultora
Chile: Aunque el bloom de algas afectó a un 15% de la producción de salmónidos, se prevé que este año se produzcan 680 mil toneladas.
Pese a las vicisitudes que ha sorteado la industria salmonicultora durante el 2016, los precios internacionales de la proteína han experimentado un excepcional crecimiento.
El filete fresco de salmón atlántico se ha situado en torno a los US$ 5,56 y 6 la libra. Este incremento está permitiendo producir por sobre los costos, que varían entre los 3 y 4 dólares por libra, destacó Felipe Sandoval, presidente de la Asociación de la Industria del Salmón A.G. (SalmonChile).
“En términos generales es beneficioso. Y uno lo ve en los resultados de las empresas. Sin embargo, en materia productiva, habrá una baja durante este año. Es difícil proyectar, pero el bloom afectó a un 15% de la producción. Pienso que la caída debe ir en ese porcentaje. El año pasado fueron sobre 800 mil toneladas, por lo que deberíamos llegar a las 680 mil”, afirmó Sandoval.
Estabilidad de precios
En tanto, José Ramón Gutiérrez, presidente ejecutivo de Multiexport Foods, argumentó que después del FAN del verano “el precio subió producto de la escasez de producción y eso llevó a que el precio se haya mantenido estable, en valores altos. Esta condición debería mantenerse por lo menos hasta 2017”, comentó.
En términos productivos, el ejecutivo afirmó que la industria deberá definir en base a cómo le afectará la nueva regulación. “Por lo que se ve, la producción del próximo año debería ser muy parecida a lo de este año, quizás un poco más arriba, pero a niveles razonables”, pronosticó Gutiérrez.
Óscar Garay, gerente de Salmones Magallanes, reconoció una favorable reacción en los precios, al salir una importante cantidad de la producción.
“Esa coyuntura se ha mantenido. Ha fluctuado un poco, pero sigue en un muy buen nivel, que debería manterse hasta por lo menos la mitad del próximo año. La industria está ganando plata por cada kilo que vende, que es como debiera ser”, especificó, anticipando un leve incremento productivo en 2017, aunque en un nivel inferior a 2015, cuando se llegó a 840 mil toneladas. “En la medida que la producción no crezca bruscamente, los precios deben tender a mantenerse”, calculó.
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