"Una vez manifestada la floración, son pocas las acciones que pueden ser abordadas"

El doctor y experto en floraciones de algas nocivas y toxinas marinas, Leonardo Guzmán, quien además es jefe de la división de Investigación en Acuicultura del Instituto de Fomento Pesquero (IFOP), se refirió a los recientes eventos de  floraciones algales que afectan la industria salmonicultora.

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El especialista, comentó que se ha descrito que a escala global, que en las últimas cuatro décadas, la ocurrencia de floraciones de algas nocivas (FAN) es más frecuente, más intensa y abarca áreas geográficas más extensas. Chile no estaría ajeno a esta situación, particularmente el sistema estuarino de fiordos y canales. Además, el investigador agregó que existen diversas hipótesis que intentan explicar esta circunstancia y que se debe tener presente que las FAN son diversas, y que la nocividad es una calificación desde la perspectiva humana, por los efectos que producen sobre la salud pública y las actividades productivas, con los consecuentes efectos sociales y económicos.

¿Es normal que ocurran estos eventos y en la magnitud que lo han hecho, o nos estamos saliendo de lo habitual?

La presencia de floraciones no puede ser calificada como una situación anormal, pero pueden expresarse con distinta intensidad y abarcando coberturas geográficas diferentes, más o menos extensas, lo cual es dependiente de las condiciones ambientales que determinan la iniciación, mantención y declinación de estos eventos. Estas condiciones son complejas y no siempre son conocidas y comprendidas apropiadamente.

Durante este año, en comparación con los dos años previos, las temperaturas superficiales del agua de mar (primeros 10 metros) en el área del Seno Reloncaví y sectores adyacentes han sido en promedio del orden de 2 grados más cálidas. Esto forma parte de las desviaciones que es factible observar ligadas a variaciones climáticas, teniendo presente además que existen efectos del fenómeno de El Niño que está en su fase terminal y que se expresa en condiciones como las observadas durante este verano, caracterizado por un muy buen tiempo, alta insolación y calma que son factores propicios para la iniciación de una floración. Se debe tener presente que durante el siglo pasado los Niños más intensos ocurrieron durante 1982-83 y 1997-98, siendo el de 2015-16 comparable en intensidad con este último.

Actualmente, no existen antecedentes para señalar de manera categórica, que lo que estamos observando, está ligado con lo que se define como Cambio Global, pero se estima que las condiciones que se pronostican que ocurrirían ligadas a este cambio, determinarían una mayor ocurrencia de floraciones nocivas. Sin embargo, estos cambios deberíamos esperarlos en varias décadas más, ahora la situación debe ser explicada por El Niño 2015-16.

¿Chatonella es la especie que generalmente se encuentra en estos bloom de verano?

En este momento es de conocimiento público que la floración que ha ocasionado un fuerte impacto sobre la actividad salmonicultora es provocada por una microalga denominada Pseudochattonella cf. verruculosa, identificada por Miriam Seguel, del Centro de Análisis y Recursos Ambientales de la Universidad Austral de Chile (Ceram) y confirmada por el Dr. Jacob Larson del Centro de Floraciones de Algas Nocivas de la COI (Comisión Oceanográfica intergubernamental), Copenhague, Dinamarca. Conclusiones que son compartidas por nuestra especialista en microalgas Sra. Ximena Vivanco.

Esta microalga es ictiotóxica, ha sido citada en condiciones de floración en Japón, Suecia, Noruega, Alemania, Dinamarca, Nueva Zelanda. Y ya había sido señalada para aguas chilenas en 2012 por Jorge Mardones y Alejandro Clément (Harmful Algal News).

Estas microalgas tienen condiciones adaptativas que le permiten aprovechar escenarios particulares del ambiente. Algunas microalgas lo hacen de manera recurrente, como sucede con varias microalgas nocivas propias de nuestros sistemas como Alexandrium catenella (especie fuente primaria del veneno paralizante de los mariscos), pero respecto de Pseudochattonella cf. verruculosa no se dispone de mayor información. Lo concreto, es que forma parte de la biota, al menos del mar interior de Chiloé.

 Además, es importante tener presente que son necesarios estudios específicos para determinar con certidumbre la identidad del taxón que ha ocurrido en el mar interior de Chiloé. Su morfología, y otros rasgos registrados por microscopía, permiten señalar que se trata de una Pseudochattonella, parecida o cercana a verruculosa, pero es necesario más antecedentes para entregar una respuesta definitiva respecto de este taxón. Además de todos los estudios que permitan conocer su ciclo de vida, toxina asociada, pigmentos, genética, similitudes o diferencias con la otra especie de Pseudochattonella conocida, por señalar alguno de los tantos aspectos que deben ser abordados.

¿Qué efectos produce esta microalga en los peces?

La diversidad de floraciones nocivas se origina por el hecho que existen distintos taxones que las producen, pero, de manera muy general, se pueden clasificar en floraciones nocivas que producen alta biomasa y que, consecuentemente, luego que mueren los microorganismos que producen la floración, se inicia un proceso intenso de biodegradación, asociado con un alto consumo de oxígeno, que determina condiciones inapropiadas, e incluso la muerte, para otros organismos como consecuencia de una disminución drástica del oxígeno disponible; asimismo, están las floraciones asociadas a taxones que producen toxinas, las cuales pueden afectar al componente biótico del ecosistema abarcando desde invertebrados hasta vertebrados superiores (incluido el hombre), causando distintos tipos de efectos y también muerte. Un ejemplo, es el taxón que produce el veneno paralizante de los mariscos, toxina que es concentrada por mariscos filtradores, debido a la modalidad de alimentación de los mariscos y, finalmente, si éstos son consumidos por el ser humano, dependiendo de su concentración, pueden producir la muerte. Existe, además, un grupo menor de microalgas, también nocivas, que producen efectos derivados de su morfología (por ejemplo espinas, setas como la diatomea Chaetoceros convolutus), las cuales eventualmente pueden afectar las branquias de peces, generando estrés y consecuentemente una mayor susceptibilidad a enfermedades, inapetencia, etc., derivado de su presencia.

En estos días se ha desarrollado un taller orientado a conocer con mayor precisión los efectos de esta floración a nivel del pez. Este tipo de microalga produce toxinas lipofílicas, que afectan las branquias de los peces, que finalmente se traducen en una deficiencia de la osmoregulación y la asfixia de los peces. La literatura respecto de este tipo de microalga no entrega mayor información, la mayor parte está orientada a Chattonella, una microalga cercana, pero diferente de Pseudochattonella.

¿Qué recomendación, desde el punto de vista de la prevención y control, haría a los profesionales de los centros de cultivo?

Sólo puedo hacer comentarios de índole general, pues una vez manifestada la floración son pocas las acciones que pueden ser abordadas. El ideal es disponer de planes de contingencia, en el sentido que contar con un programa estructurado de acciones y personas responsables cuando ocurren eventos de esta naturaleza. Serán las condiciones de cada floración y las características particulares de los lugares de emplazamiento, tipo de cultivo y medios disponibles, los que permitirán actuar más o menos apropiadamente para cada circunstancia.

Se ha señalado que el traslado de los peces son medidas, pero tiene complejidades, como también el traslado de las balsas jaulas, que también representa dificultades mayores. El hundir a los peces a profundidades con poca luz es también una medida recomendable, pero también de difícil aplicación y dependiente de las características particulares de las áreas en que se encuentra emplazado el centro.

El uso de barreras de burbujas de aire, faldones como barreras físicas, podría ser aplicable, pero dependerán de las particularidades de cada floración. Por ejemplo, en Corea se ha aplicado arcillas desde barcazas adecuadas para estos efectos, pero ello supone disponer de las arcillas en cantidades suficientes y no cualquier tipo de arcilla es apropiada. El mecanismo de acción se sustenta en que las arcillas arrastran hacia el fondo marino a las microalgas. Pero su utilización tiene externalidades negativas para otros componentes bióticos del ecosistema, como otras microalgas que también son arrastradas y también para los organismos que viven en el fondo marino, pues reciben una lluvia de sedimentos que determinan también condiciones inapropiadas para la vida.

En síntesis, la herramienta más importante es la prevención, donde los monitoreos entregan alertas tempranas, instancias en la que los planes de contingencia podrán orientar respecto de las medidas más apropiadas a aplicar en cada caso y, dadas las dificultades asociadas para mitigar los efectos de este tipo de floraciones, los seguros que cubren este tipo de riesgo constituyen una protección importante cuando ocurre este tipo de eventos.

¿Algún otro comentario sobre este tema?

Sólo tener presente que si bien hay una floración intensa en el área norte del mar interior de Chiloé provocada por la microalga señalada previamente, es importante tener presente que desde el sureste de Chiloé hacia el sur y particularmente en la región de Aysén, actualmente se está desarrollando una extensa floración de Alexandrium catenella y en sectores puntuales además floraciones de Dinophysis acuminata y de Dinophysis acuta. La primera como se ha señalado, asociada con el veneno paralizante de los mariscos y los dos últimas a toxinas lipofílicas, entre las cuales se incluye el veneno diarreico.