
Sernapesca fortalece fiscalización de envíos
En momentos en que los envíos a Rusia, Brasil y China toman mayor importancia (dado el crecimiento en la demanda de esos países o en la participación de Chile dentro de esos mercados) el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) ha destinado importantes esfuerzos a fortalecer y asegurar que las exportaciones chilenas de salmónidos cumplan con las normas de seguridad alimentaria de esos destinos.
Según lo detallado por el director nacional de Sernapesca, José Miguel Burgos, a raíz de la visita de la delegación de la Federación Rusa, su Servicio se encuentra implementando una serie de medidas que apuntan a reforzar el sistema de control sanitario. “Dentro de ellas, por ejemplo, el fortalecimiento de las inspecciones de embarque, de manera de fortalecer la cadena de inspección, ya no sólo en la producción, sino que también en el minuto en que los productos están saliendo fuera de Chile”, detalló la autoridad.
Adicionalmente, precisó que Sernapesca ha incluido algunos parámetros indispensables de incorporar de acuerdo con la legislación rusa, en sus programas de monitoreo y control de las plantas de proceso que exportan a dicho mercado. “Lo mismo estamos haciendo con el mercado chino, que en el caso de mitílidos y salmónidos hoy representan los desafíos de crecimiento, modificando buena parte de algunos de los programas más importantes, fundamentalmente en los controles de calidad en las plantas de proceso”, puntualizó.
En cuanto a los reclamos brasileños por presencia de pescados con heridas en la piel y daño en agallas, el titular del Sernapesca comentó que modificarán la norma técnica del Programa de Aseguramiento de la Calidad (PAC) y se van a hacer muchas más exigencias respecto a la selección de los productos que ingresan a las plantas de proceso, de tal modo que aquellos que tengan heridas quedarán claramente identificados y serán impedidos de ir tanto al mercado brasileño, como al mercado ruso. “Estos productos, en general, se utilizan para producción de carácter industrial, pero al quedar bloqueados e identificados va a impedir que terceros compradores puedan utilizarlos para venta en mercados de consumo humano directo sin elaboración, y esto, es parte del reforzamiento que estamos haciendo del tema sanitario”, concluyó José Miguel Burgos.