Víctor Hugo Puchi, expresidente de AquaChile. Foto: Jonathan Garcés, Salmonexpert.

Víctor Hugo Puchi: Hemos fallado comunicacionalmente

Chile: El expresidente de AquaChile afirmó que en Noruega, por ley, el 1% del valor de las exportaciones se debe invertir en promover la imagen del salmón en el país nórdico y en Chile, “eso es cero”.

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El viernes pasado, se llevó a cabo el Seminario internacional “Minería, acuicultura y fruticultura. Claves para la productividad”, organizado por Cieplan-UTalca y CAF, donde por la industria chilena del salmón, uno de los expositores fue Víctor Hugo Puchi, emblemático empresario del sector, expresidente de AquaChile, compañía que hoy pertenece al holding Agrosuper.

En su exposición, dentro del módulo “Productividad y Competitividad en Acuicultura”, Puchi fue sincero y admitió que como industria salmonicultora chilena “hemos fallado comunicacionalmente. La política y las comunidades están influenciadas por la información que existe, donde hay muchos mitos, lo que puede afectar la reputación interna y la internacional”.

“Los huevos que no se cacarean”

“No hemos sido eficientes en divulgar lo que se ha hecho, lo positivo, en el marco de una tendencia comunicacional donde se propaga más lo negativo. En ese sentido, uno tiene que esforzarse mucho para que la gente logre ver lo bueno y lo malo de la industria, efectuando un análisis integral con verdades”, señaló el empresario.

De hecho, a causa de las fallas de comunicación de la industria nacional, se extiende desinformación iniciada por información sesgada o completa, por ejemplo, en cuanto al uso de antibióticos, “donde Noruega no los utiliza no porque se preocupe más del tema, sino porque no tiene bacterias como la enfermedad SRS en Chile. Pese a ello, no hay residuos de antimicrobianos en los mercados, ello es certificado por las autoridades sectoriales”, recalcó el expresidente de AquaChile.

“La verdad es que los huevos que no se cacarean, nadie los conoce, y eso es parte del trabajo que la industria nacional deberá hacer con más fuerza. Pero estamos lejos de igualar a Noruega, donde por ley casi el 1% del valor de las exportaciones se debe invertir en promover la imagen del salmón en el país nórdico y en Chile, eso es cero porque no es obligación”, contó Puchi.

Es que, de acuerdo con el empresario, siempre existe la típica afirmación de “yo estoy haciendo mi esfuerzo propio” y por eso no se realiza un trabajo comunicacional conjunto en la industria chilena del salmón. “O alguien espera que otro lo haga, en vez de él mismo”.

Ser una industria querida

¿Cómo ser una industria querida por el país, aceptada socialmente? El expresidente de AquaChile es enfático: “si la producción debe reducirse o cambiarse las distancias entre los centros de cultivo, que se haga, con una actitud humilde. Hay que renunciar al crecimiento insostenible, en base a reglas claras. Pues con el salmón se puede ganar en precios y valor agregado, más allá del volumen”.

Sin embargo, Puchi acusó que la respuesta de los gobiernos ante temas como relocalizaciones y fusiones de concesiones ha sido de “si enviamos un proyecto al Congreso, no sabemos lo que pasará ahí”, ello “por la actitud populista de los políticos que afecta la productividad de la industria del salmón. Ojalá eso cambie por el bien de la gente del sur de Chile”.