Actualmente es factible fabricar alimentos para salmones sin harina ni aceite de pescado. Foto: Archivo Salmonexpert.

Reducción de harina y aceite de pescado: ¿afecta dietas óptimas para salmones?

Chile: Según las empresas productoras, existe el conocimiento para alimentar peces con fórmulas sin ingredientes marinos, utilizando otras fuentes de Omega 3, disminuyendo la presión en la pesca pelágica.

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Según el último reporte de sostenibilidad del Global Salmon Initiative (GSI), gracias a las innovaciones permanentes de la acuicultura del salmón durante los últimos 20 años, la industria de alimentos ha reducido la cantidad de harina de pescado del 65% al 18% y de aceite de pescado del 24% al 11 %, y bajó el FCR de 2,4:1 a 1,15:1, en tanto que mantuvo dietas óptimas para los salmones.

Considerando la tasa de dependencia de harina de pescado en el alimento del salmón chileno, de los ocho productores nacionales que informan sus resultados al GSI, cuatro bajaron el uso de este ingrediente marino, tres lo subieron, y uno mantuvo su índice en 2021, en comparación al 2020.

De acuerdo con lo comentado a Salmonexpert por Rodrigo Solervicens, gerente Técnico de Cargill en Chile, actualmente es factible fabricar alimentos sin harina ni aceite de pescado. “A pesar de lo anterior, el uso de fuentes sustentables de ingredientes marinos es todavía eficiente. La harina de pescado se usa principalmente en dietas de agua dulce y el aceite de pescado se usa exclusivamente como fuente de Omega 3 en todo el ciclo de cultivo”.

Por su parte, Óscar Berríos, product manager Agua Mar de BioMar Chile, explica que la incorporación de harina y aceite de pescado en las dietas es del orden de 18% e indicadores globales demuestran la menor presión que hay sobre la pesca pelágica para producir un kilo de salmón.

“En los últimos 10 años, hemos investigado e implementado dietas que permiten el reemplazo total o parcial de harina de pescado y la reducción consistente del uso de aceite de pescado. Si bien los ingredientes marinos como harina y aceite de pescado son excelentes fuentes de nutrientes vitales para la nutrición de los peces, son recursos finitos”, expone Berríos.

Para el ejecutivo de Cargill, la industria de alimentos para salmones lleva años trabajando para lograr independizarse del uso de ingredientes marinos para la alimentación de peces y en especial para salmones. Actualmente, existe el conocimiento para alimentar los salmones con fórmulas que no contienen ingredientes marinos. La harina de pescado, como fuente de proteína, fue la primera en ser reemplazada, a través de la formulación por aminoácidos en vez de proteínas completas.

“En Cargill sabemos cuál es el perfil de aminoácidos que los peces requieren en cada etapa del ciclo de vida, por lo tanto, podemos satisfacer el requerimiento de aminoácidos desde distintas fuentes, no necesariamente desde la harina de pescado. El aceite de pescado es la principal fuente de Omega 3, nutriente esencial para los salmones. Al existir fuentes alternativas de estos ácidos grasos esenciales de fuentes no marinas, podemos satisfacer la demanda de estos nutrientes sin la incorporación de aceite de pescado”, aclara Solervicens.

En tanto, desde BioMar Chile destacan la innovación de introducir materias primas a base de algas o de harina de insectos como ingredientes posibles en el alimento, entre otros.

Según BioMar, entre el 2017 y 2020, las tasas de conversión para Salmón Atlántico disminuyeron un 5% y el peso de cosecha se incrementó en un 13%. Foto: BioMar.

“Al incluir, por ejemplo, microalgas ricas en ácidos grasos omega de cadena larga en las dietas de alimentos, es posible pasar por alto la pesca blanca e ir directamente a la fuente original de omega 3 marino. Esto ayuda a aliviar la presión sobre los océanos al mismo tiempo que garantiza que los peces obtengan la nutrición óptima necesaria, y también reduce la relación Fish in:Fish out”, puntualiza Berríos.

Indicadores productivos

Para el gerente Técnico de Cargill Chile, los indicadores productivos y calidad del producto final por disminución de ingredientes marinos (harina y aceite de pescado) no se ven afectados. “Por ejemplo, el nivel de Omega 3 es una de las características más importantes de la carne de salmón, si se suministra la cantidad suficiente de Omega 3 en la dieta, el filete de salmón tendrá la cantidad adecuada y suficiente, igual que si los peces hubiesen consumido aceite de pescado”.

En tanto, el product manager Agua Mar de BioMar Chile, comenta que de acuerdo a los datos de la compañía y los resultados de sus clientes en los últimos años, confirman que el incremento en la energía digestible en las dietas ha mejorado la conversión del alimento acortando los ciclos y alcanzando mejores pesos a cosecha.

“Estos progresos en los índices productivos, muestra que el reemplazo de fuentes marinas de materias primas como el aceite y harina de pescado, no han alterado estos índices y, de hecho, la tecnología e investigación que hemos realizado en materia de nutrición y uso de materias primas idóneas, han logrado resultados como conversiones biológicas menores a 1,0, con peces con peso cosecha superior a 6 Kg.”, indica Berríos.

Estrategias nutricionales

Para Rodrigo Solervicens, el entendimiento profundo de los requerimientos de los peces es fundamental para poder definir las estrategias nutricionales. El modelo Compass y el concepto de Nitrógeno Esencial de Cargill, que se basan en información de performance productivo y calidad de millones de peces en múltiples condiciones productivas, son capaces de predecir los requerimientos nutricionales de los peces en cada momento del ciclo de vida. Estos complejos modelos matemáticos sumados a la experiencia de Cargill en la producción de alimentos cárnicos en otras especies, nos permite ofrecer soluciones balanceadas para todos las necesidades de los peces, incluyendo el foco en la calidad final de los productos para el consumidor final”.

Del mismo modo, según Óscar Berríos, si bien BioMar continúa transformando los alimentos acuícolas con nuevas fuentes nutricionales innovadoras, todavía no existe un sustituto perfecto para reemplazar el 100% de los ingredientes marinos. “El aceite y la harina de pescado son nutrientes excelentes cuya posibilidad de abastecimiento responsable y sostenible es exclusivamente a través de proveedores que cuentan con certificación, que ha sido el compromiso de la compañía”.