Cómo la industria salmonicultora deberá certificarse en el uso responsable de la soya

Foto: Pixabay.

Chile: La Cadena de Custodia RTRS para el uso responsable de la soya será una realidad para el 2026, por lo que cada uno de los procesos de la cadena del salmón deberá comenzar con el proceso de certificación.

Kabsa es una empresa del Grupo Angelini, formada por profesionales expertos en fuentes de proteínas y aceites para alimentación animal especializada, en industrias tales como acuicultura y alimentación de mascotas.

Actualmente, la compañía es desarrolla insumos para la fabricación de alimento para salmones, proveyendo proteína animal, proteína vegetal, proteína marina y aceite de origen marino, componentes principales de la dieta de salmónidos.

“El estándar del Aquaculture Stewardship Council (ASC) para cultivo responsable del salmón tiene un cuidado y orientación hacia el uso de la proteína vegetal, en este caso la certificación RTRS. Es por ello por lo que Kabsa se encuentra facilitando que la cadena de custodia de la proteína de soya esté completa y nuestro producto pueda ser utilizado de la manera que requiere el estándar”, explicó Humberto Mena, gerente comercial de Kabsa.

Es así como la compañía provee de concentrado de proteína de soya a las compañías productoras de alimento para salmones, la que proviene de Brasil y es elaborada por CJ Selecta.

“Anticipando esta necesidad de la industria salmonicultora, CJ Selecta concretó la acreditación hace un año aproximadamente, con un trabajo previo de tres años. Esto no es menor, porque se hizo necesario que CJ visitara cada granja de cultivo de soya y cumplir con los requisitos que impone el estándar. Estos apuntan a las áreas de cultivo de manera de no tener daño en el ecosistema, no tener deforestación, ni desmonte de tierra, erosión, uso de fertilizante y herbicidas, y por el lado de la preocupación social, que no haya trabajo de esclavos, trabajo infantil, que se reciba un salario digno y que exista preocupación por el desplazamiento de los trabajadores involucrados en los cultivos”, detalló Mena.

Eslabones de la cadena

Dado que Kabsa representa en Chile a CJ Selecta, el ejecutivo comentó que la compañía debe facilitar el acceso a la certificación RTRS a sus clientes de las plantas de alimentos para salmones, quienes a su vez tienen que hacer llegar la certificación a los productores, y estos, de igual manera, tienen que acreditar frente a sus clientes de los mercados de destino que lo exigen, que cumplen con lo solicitado por el estándar ASC.

“El estándar ASC requiere la certificación RTRS de la soya, y para que sea completa, es necesario que la cadena de traspaso del fabricante, en este caso CJ Selecta, pueda llegar de manera correcta al productor de salmón. Es así como el estándar impone que los sistemas de transporte deben acreditar la cadena de custodia, es decir los barcos en los que se transporta la soya, los puertos donde se recibe, las bodegas donde se almacena, y el transporte mediante el cual se traslada a las plantas de alimento. Y la planta de alimento, una vez que elabora las dietas para salmones, es capaz de transmitir el sello que ha recibido del proveedor de concentrado de soya, hacia el productor de salmón y este hacia el consumidor final”, apuntó el ejecutivo de Kabsa.

A juicio de Mena, actualmente los dos extremos de la cadena están certificados, es decir, el fabricante de concentrado de soya y el productor de salmón. “Sin embargo, los eslabones intermedios, no tienen la certificación. Esto nos motivó a organizar jornadas informativas de difusión con profesionales de las plantas de alimentos para salmones, nosotros como proveedores de la proteína vegetal y los sistemas de transporte, puertos y bodegas. Todos ellos deben obtener la certificación RTRS antes de 2026, ya que en ese momento el estándar ASC para acreditar que un salmón producido en Chile, que fue alimentado con dietas que contenían soya, esa soya debe estar acreditada. Por ello, nuestro interés primordial es informar a toda la cadena, de manera que rápidamente puedan certificarse, entendiendo el sentido de esto y que tomen contacto con las casas certificadoras para hacer este proceso lo más eficiente posible”.

De acuerdo con lo planteado por Humberto Mena, lo que requiere el estándar ASC con la certificación RTRS apunta a la preservación del ecosistema, y en el caso de Brasil, proteger el Amazonas. “Igualmente está la preocupación asociada al cambio climático y la deforestación. Finalmente, el consumidor final contribuye a esta responsabilidad, pues va a preferir un salmón que considere en su alimentación, una soya que tenga todas las garantías. Porque la certificación es una garantía real de que hay un cuidado por el medio ambiente, una preocupación social y que existe protección al ecosistema y a las áreas que no se deben deforestar”.