SalMar decide reducir sus planes de cultivo

Ante las propuestas de un impuesto del 62%, SalMar ha abandonado su plan de comprar biomasa adicional en Noruega.

Noruega: Según la compañía, el impacto del 40% adicional de impuestos propuesto, tendría consecuencias importantes para las decisiones de inversión en salmonicultura.

El productor de salmón SalMar responsabilizó al aumento masivo de impuestos propuesto de la decisión de abandonar sus planes de pagar al gobierno noruego NOK 244,6 millones (US$22,5 millones) por el derecho a cultivar 1.223 toneladas adicionales de salmón.

En un anuncio de mercado, SalMar, el segundo productor de salmón más grande de Noruega después de Mowi, explicó que a principios de este año compró su participación relativa disponible para el ajuste de capacidad bajo el sistema de "semáforo" de Noruega.

Sin embargo, el miércoles pasado, el Ministerio de Comercio y Pesca de Noruega informó que los salmonicultores que compraron una mayor capacidad de permisos en 2022 tendrían la oportunidad de cancelar la compra, pero deben hacerlo antes del 6 de octubre.

“SalMar ha optado por aprovechar la oportunidad para rescindir la compra”, indicó la empresa.

El sistema de semáforos

El sistema de semáforos designa las áreas de producción de salmón de Noruega como rojas, amarillas o verdes, según el impacto que se considere que tiene la salmonicultura en el salmón salvaje de dichas áreas. Los productores de las zonas con luz roja deben reducir la producción en un 6%, mientras que los de las zonas con luz verde pueden aumentar la producción hasta en un 6 %, aunque no es gratis: deben comprar esa capacidad al gobierno a un precio elevado

“Esto se debe al impuesto a la renta de recursos que el Gobierno ha anunciado ahora. Las propuestas implican, entre otras cosas, que el Estado adquiera el 40% de todos los flujos de caja de la empresa, y que la participación de los demás propietarios se reduzca correspondientemente".

"Esto se expresa mediante el aumento del impuesto total para las empresas salmonicultoras en Noruega del 22% al 62%. Si se adoptaran las propuestas, habría consecuencias importantes para las decisiones de inversión y la asignación de capital de la empresa en el futuro”, manifestaron.

“Esto ha creado una situación que hace que la empresa no encuentre justificado pagar la referida remuneración. La sorprendente propuesta del gobierno, sin esperar la recomendación del comité fiscal designado por el gobierno, también ha llevado a una imprevisibilidad por parte de las autoridades que refuerza la necesidad de una evaluación más cercana de las futuras estrategias de inversión de la empresa”, puntualizaron desde SalMar.