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Desde el microscopio: educación científica para la industria del salmón y más allá

Video en canal de YouTube "Desde el microscopio".

La bióloga marina Fabiola Villanueva lidera un canal educativo en YouTube que explica, con lenguaje simple y visual, el impacto de las microalgas en sectores como la salmonicultura y la mitilicultura.

Con el objetivo de generar un archivo vivo y accesible de conocimientos sobre Floraciones Algales Nocivas (FAN) y su impacto en la industria acuícola, la bióloga marina y gerente general de FAN SpA, Fabiola Villanueva, lanzó el canal de YouTube “Desde el microscopio”. Esta plataforma audiovisual busca traducir información científica y técnica en contenidos comprensibles y atractivos para diversos públicos, incluyendo trabajadores de centros de cultivo, comunidades costeras, estudiantes y familias.

“La idea es poder relatar todo lo que nos ha pasado en la industria y que quede estampado en algún lugar. Que sea fácil de entender, que no se pierda con el tiempo, y que las futuras generaciones también puedan acceder a esa información”, explicó Villanueva.

El canal nace desde la experiencia acumulada durante más de dos décadas en el monitoreo y análisis de microalgas, y busca también preservar la memoria colectiva de eventos significativos para la salmonicultura y otras actividades productivas del mar. “Nos han pasado tantas cosas en estos años, desde floraciones de gran impacto hasta episodios menos conocidos. Pensé en dejar ese conocimiento disponible y lo más interactivo posible, por eso opté por YouTube, porque hacer videos cortos contando una historia es mucho más fácil que escribir un catálogo o un informe técnico que quede guardado en un cajón”, señaló la profesional.

Todos los contenidos del canal son elaborados de forma autónoma por Villanueva. El material combina imágenes reales obtenidas en centros de cultivo con animaciones, esquemas y música, lo que permite una experiencia visual dinámica. “Todo lo hago yo sola. Edito, grabo, hago las locuciones, y me apoyo a veces en mis hijas para evaluar si el contenido se entiende. Si ellas lo comprenden, entonces puede llegar también a los más pequeños. Esa es la idea, que no se entienda solo desde lo técnico, sino desde lo humano y cotidiano”.

Fabiola Villanueva.

El enfoque del canal es fundamentalmente educativo. Cada video aborda una microalga específica o un evento relevante, como la floración de Alexandrium catenella en 2016, o casos recientes con especies como Karenia mikimotoi, Pseudochattonella verruculosa o Blackfordia virginica. A estos contenidos se suman episodios vinculados a salud pública, como las toxinas diarreicas de los mariscos asociadas a Dinophysis acuta. “Siempre mi objetivo ha sido tomar a la industria como prioridad, pero también contar que hay muchas más cosas debajo del microscopio. Hay un mundo entero ahí adentro, lleno de belleza, pero también de riesgos que debemos conocer”.

Otro de los objetivos del canal es ir en contra de la desinformación. Villanueva recuerda episodios recientes donde floraciones generaron confusión en la población, como el caso de una floración de Plurocentrum micans que, al descomponerse, provocó un fuerte olor a gas en Puerto Montt. “Los bomberos andaban como locos buscando fugas en todas partes, cuando lo que había era una microalga en descomposición. Nadie lo sabía. Por eso es importante que esta información llegue, no solo a la industria, sino también a la comunidad. Porque en el mar pasan cosas invisibles que pueden afectarnos”.

Contenido

El material audiovisual se nutre de múltiples fuentes: fotografías y registros propios, imágenes compartidas por técnicos de centros de cultivo, referencias visuales obtenidas de internet y colaboraciones de divulgadores científicos como el blog de Marcos Godoy. “Tengo un disco lleno de fotos y videos. Muchas veces uso imágenes de los propios centros, y siempre trato de acreditar su origen. Por ello pido que me envíen las imágenes con los nombres, porque quiero que quede claro de quién es cada aporte”, sostuvo la bióloga.

Además de compilar y explicar fenómenos ya conocidos, el canal también responde a preguntas frecuentes que surgen desde el trabajo en terreno. “Recojo las inquietudes de los mismos centros. Entonces, hago un video explicando paso a paso cómo se hace. Si los técnicos no lo entienden, significa que hay que contarlo de otra forma. Esa es la gracia del canal, convertir la experiencia en herramienta educativa”.

Villanueva pone énfasis en que este proyecto no está dirigido solo a profesionales del área científica, sino a un público mucho más amplio. De hecho, ha sido presentado incluso en colegios. “Una guía taxonómica no es para todos. Un paper en inglés tampoco. Pero un video en YouTube, bien contado, puede ser visto por cualquiera. Puede ayudar a un técnico, a un estudiante, a una madre o padre que vive del mar. Por eso decidí que este era el formato correcto para comunicar lo que sé”.

La estética visual, el lenguaje simple y el humor son elementos clave del canal. A través de personajes animados, anécdotas de laboratorio y referencias culturales, Villanueva logra captar la atención de audiencias que muchas veces se sienten alejadas de los temas científicos. “No todo tiene que ser serio. Podemos contar lo mismo de manera entretenida y cercana”, aseguró la profesional.

Actualmente, el canal cuenta con diez videos publicados, y otros tantos se encuentran en post producción. La autora planea mantenerlo activo a largo plazo, sumando nuevos episodios conforme surjan temas relevantes. “No tengo un número determinado. Quiero que el canal se mantenga vivo. Hay tanto material y tantas historias que podría estar subiendo videos por los próximos 28 años. Y si algún día yo ya no estoy, que alguien lo siga alimentando. Eso me encantaría”.

“Más que una plataforma de divulgación técnica, Desde el microscopio se plantea como una herramienta para preservar la memoria científica y ambiental de la acuicultura chilena, y para fomentar la educación desde etapas tempranas. “Si un niño puede entender lo que es una marea roja y sabe por qué no debe comer mariscos en ciertas fechas, ya estamos haciendo algo importante. Porque cuando crecemos con ese saber, lo cultivamos. Y eso, a largo plazo, puede salvar vidas”, concluyó Fabiola Villanueva.