Atilio Morgado, Pablo Fuentealba, Jaime Romero y Alejandro Yáñez. Foto: Loreto Appel, Salmonexpert.

Investigadores analizan la importancia del I+D en pro de las ventajas competitivas de la salmonicultura

Chile: Un panel de expertos, provenientes de la academia y el área de la investigación aplicada, debatieron en torno al desarrollo de instancias que generen conocimiento y entregue respuestas a las problemáticas de la industria chilena del salmón.

“La industria del salmón en Chile: hacia una mayor creación de riqueza basada en ventajas competitivas sostenibles”, se denominó el panel de expertos, en el marco del desarrollo del Encuentro Regional Corfo "Los Lagos: Ciencia, Tecnología y Empresa", realizado recientemente en la Universidad de Los Lagos sede Chinquihue.

En la iniciativa, participaron Pablo Fuentealba, Ingeniero en Biotecnología de la Universidad de Concepción (UdeC) y Jefe de Laboratorio de I+D de la Empresa FAV; Jaime Romero, Bioquímico de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso e Investigador del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (Inta) de la Universidad de Chile; y Alejandro Yáñez, Bioquímico de la Universidad Austral de Chile e Investigador Asociado del Centro Interdisciplinario para la Investigación Acuícola (Incar). En tanto, el moderador fue Atilio Morgado, Biólogo Marino de la UdeC.

Los profesionales se refirieron, entre otras temáticas, a como su trabajo se conecta con los desafíos, que ellos visualizan, tiene la industria del salmón.

Para Pablo Fuentealba, la sustentabilidad del sector es una de las grandes problemáticas que vislumbra, en particular, la densidad de los cultivos de salmón. “Esto conlleva el desarrollo de distintas complejidades quede trasfondo generar proseguir con un proceso más sustentable de la salmonicultura. Las patologías impactan sustancialmente en los ámbitos de salud y medioambiente y actualmente en FAV estamos desarrollando estrategias para disminuir el impacto que tienen estas en la productividad de los cultivos”, explicó.

En tanto, Jaime Romero, argumentó que las investigaciones emanadas de la academia apuntan a generar un bien público relacionado con el conocimiento. “Creo que lo que nos falta es traducir ese conocimiento en algo que nos permita, al sector académico y de investigación, tener una valoración por la comunidad y el sector industrial. El salmón, por la importancia estratégica que tiene para la región, siempre es un elemento interesante de estudiar tanto su fisiología, como sus aspectos microbiológicos y otros aspectos básicos, que se pueden traducir en una buena publicación científica, como también un conocimiento que le genere a la industria un gran impacto”, aseveró.

Mientras que Alejandro Yáñez, recalcó que existen muchas preguntas en el área salmonicultora y en la acuicultura en general. “En salmones hay baja investigación y creo que deberíamos tener un gran instituto de investigación en acuicultura, que lidere la investigación fundamental para tratar de solucionar los problemas. En general, cuando un investigador se enfrenta a un problema, siempre tiene que partir de la investigación básica para solucionarlo y muchas veces, ese tipo de investigación no está disponible, por ejemplo, de los patógenos que afectan al salmón. Es por lo que muchos de los diagnósticos tampoco están solucionados al 100%. Por eso la industria sí quiere participar, si quiere solución a sus problemas, y si los investigadores la escuchamos, las brechas que por 15 años han sido las mismas, podrían acortarse”, expresó.

Panel de expertos. Foto: Loreto Appel, Salmonexpert.

Creación de riqueza

Con relación a la temática específica del panel, cuyo propósito fue buscar mayor creación de riqueza basada en ventajas competitivas sostenibles, los panelistas apuntaron a los temas específicos en que cada uno se encuentra trabajando, orientados en la línea de generar ventajas en el sector salmonicultor.

“El enfoque que tiene FAV en su unidad de I+D, busca la generación de conocimiento de los principales patógenos que afectan a la salmonicultura como P. salmonis, IPN, ISA, vibriosis y aeromonas, y otras patologías que son posibles de desarrollarse en un tiempo, ya que han presentado características o episodios relevantes, en poca intensidad y bien focalizados, pero pueden manifestarse en la intensidad de las patologías que ya reconocemos. La idea es ir un paso adelante y predecir al saber cómo los factores biológicos se están comportando, de acuerdo con las dinámicas de cultivo que se están desarrollando”, comentó Fuentealba.

Por su parte, el investigador del INTA, explicó que su quehacer está muy relacionado con microrganismos. “En el caso de los peces, me interesa la microbiota y el microbioma, porque existe una interacción entre el hospedero y el hospedero, porque la respuesta de la dieta con la microbiota puede generarle tanto perjuicios como beneficios al pez, y también tiene una fuerte relación con el sistema inmune. Por ello, en ese tracto digestivo oscuro, nosotros queremos poner una lámpara molecular que nos permita medir y estudiar que está presente, que hace, como interacciona con el hospedero y con la dieta, porque la dieta es muy importante para el crecimiento, la sustentabilidad y la generación de residuos. Si somos capaces de manejar esa microbiota de manera eficiente, seremos capaces de aumentar la sustentabilidad y darle al hospedero los elementos que necesita para crecer de manera óptima y generar menos desechos”, argumentó Romero.

En tanto el investigador del Incar se refirió a que sus líneas de investigación se relacionan con el desarrollo de herramientas de diagnóstico y terapias para las principales patologías asociadas a la industria del salmón. “Lo que hacemos en biología fundamental es estudiar los mecanismos patogénicos de la bacteria Piscirickettsia salmonis, una de las más importantes y más problemáticas en la industria chilena del salmón. Queremos entender la bacteria para luego combatirla efectivamente, pues si no entendemos cuál es su biología y la forma como esta ataca el salmón, nunca vamos a poder diseñar estrategias para poder combatirla. También estudiamos sus genes, sus proteínas. En cuanto a ciencia aplicada, en el área de diagnóstico elaboramos kit para diferenciar los genogrupos que tiene esta bacteria; también kits diagnósticos que permitan visualizar la resistencia a antibióticos que se está generando en la industria; y, por otra parte, con la empresa Cargill, estamos elaborando vacunas, principalmente orales, para combatir a P. salmonis, pero también una vacuna contra el Caligus”, puntualizó Yáñez.