José Aguilar-Manjarrez durante su presentación en AquaSur 2022. Foto: Loreto Appel, Salmonexpert.

Proyecto abordará gobernanza de la biodiversidad de ecosistemas marinos costeros

Chile: La iniciativa, que involucra al Ministerio de Medio Ambiente, Subpesca, Sernapesca y la FAO, cuenta con financiamiento del Fondo Mundial para el Medio Ambiente y empezará a implementarse.

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En el reciente Congreso Internacional “Trilogía azul: océano, acuicultura y sociedad” realizado en el marco de la Feria AquaSur 2022, el oficial de Pesca y Acuicultura de la oficina regional para Latinoamérica y el Caribe de la FAO, José Aguilar-Manjarrez, expuso sobre la Planificación espacial marina como herramienta hacia un nuevo modelo de gobernanza costera en Chile.

En su charla, Aguilar-Manjarrez abordó la importancia de la pesca y la acuicultura con un modelo de desarrollo sostenible, resiliente, inclusivo y bajo en emisiones a través de un proyecto que está liderando la FAO.

“La realización de AquaSur fue una gran oportunidad para elevar el perfil del sector en un momento estratégico, ya que el 2022 es el año internacional de la pesca y la acuicultura artesanal donde la FAO es el organismo articulador. Igualmente, fue una gran ocasión para promover el diálogo de los grandes desafíos que se deben impulsar para que la acuicultura en el hemisferio sur se transforme en una actividad sostenible, con un ordenamiento adecuado en el uso de océano, con foco en el bienestar de los ecosistemas marino-costeros y sus comunidades”, sostuvo el profesional al respecto.

Según lo planteado por el oficial de la FAO, los ecosistemas marinos de Chile cuentan con una biodiversidad de importancia global, que contribuyen de manera fundamental al desarrollo del país, cuya economía es altamente dependiente de los sectores primarios y los recursos naturales y ambientales, incluyendo los sectores pesquero y acuícola.

“No obstante esta gran biodiversidad, con el avance del modelo de desarrollo económico, las zonas costeras en Chile y en diversas partes del mundo, han estado sujetas a una fuerte presión de uso por distintas actividades humanas, algunas aceleradas por la problemática del cambio climático. Todo esto, afectando los hábitats y su biodiversidad en varias zonas del país, mostrando una disminución sostenida de las principales pesquerías, afectando los medios de vida de las sociedades litorales que viven de estos recursos”, afirmó el profesional.

Por ello, según Aguilar-Manjarrez, Chile ha desplegado importantes esfuerzos dirigidos a la conservación de la biodiversidad marino-costera. “Sin embargo, estos esfuerzos aun no son suficientes para remover las amenazas asociadas a la fuerte presión de uso”.

¿Qué es la Planificación Espacial Marina?

Es un proceso integral y estratégico para analizar y asignar el uso de las zonas marítimas, con el fin de minimizar los conflictos entre las actividades humanas, pero sobretodo, maximizar los beneficios, garantizando al mismo tiempo la resiliencia de los ecosistemas marinos costeros.

La Planificación Espacial Marina (PEM) se considera, a nivel mundial, como un importante instrumento para garantizar una gestión holística, integrada y multisectorial de los océanos, mares y costas.

A la fecha, según los datos informados por la UNESCO, se han reportado aproximadamente 70 iniciativas de PEM, en diferentes países y territorios, principalmente en Europa y américa del Norte.

Proyecto

En base a lo anterior, nace el proyecto “Fortalecimiento de la gestión y la gobernanza para la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad de importancia mundial en los ecosistemas marinos costeros en Chile”, el cual es ejecutado por el Ministerio del Medio Ambiente, en conjunto con Subpesca, Sernapesca y la FAO como agencia implementadora, contando con financiamiento del Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF por sus siglas en inglés). El proyecto fue lanzado en diciembre del año pasado, comenzará a implementarse durante este mes y finalizará en diciembre del 2025.

“Según los análisis que hemos desarrollado, son principalmente tres las barreras identificadas en la gobernanza marina costera en Chile. En primer lugar, es la debilidad el marco institucional y la falta de coordinación interinstitucional. Luego, las insuficientes capacidades a nivel local para la obtención de información. Y, por último, una falta de mecanismos de incentivos y financiamiento de fomento productivo, asociado al desarrollo de nuevos bienes”, destacó el representante de la FAO.

De acuerdo con lo planteado por el profesional, el objetivo de este proyecto es desarrollar e implementar un sistema de gobernanza que coordine y articule las instituciones públicas, privadas y de la sociedad civil, para la conservación y el uso sostenible de los ecosistemas marinos costeros.

“El proyecto se implementará en dos zonas piloto. En la Zona Norte, que abarca las regiones de Atacama y Coquimbo, en las comunas de Freirina y La Higuera. Mientras que, en la Zona Sur, que abarca bahías, canales y fiordos, se desarrollará en la comuna de Cisnes en la Región de Aysén”, sostuvo, agregando que “la estrategia de intervención del proyecto descansa principalmente sobre un modelo altamente participativo de gobernanza y gestión marina. En este modelo se promoverá una visión común del territorio con sus actores y herramientas disponibles, bajo una metodología de planificación espacial marina y un manejo adaptativo con un enfoque ecosistémico de conservación y el uso sostenible de los ecosistemas marinos costeros”.

A su juicio, este proyecto estará a cargo de los municipios, con un fuerte apoyo de los gobiernos regionales y nacionales, integrando los puntos de vista y las expectativas de los servicios públicos y privados, y, particularmente, de las comunidades costeras organizadas, usuarios y administradores del borde costero.