Centro de cultivo de salmón en Magallanes. Foto: Blumar.

¿Cómo lograr una industria del salmón sustentable en Magallanes?

Chile: Para Subpesca, el límite sostenible de la salmonicultura magallánica es de 150 mil toneladas de producción anual, con no más de 200 centros de cultivo autorizados para operar en la región.

Publicado Actualizado

En el marco de la primera jornada de Aquaforum, ayer se desarrolló vía online el módulo del evento llamado “Políticas Públicas para una Salmonicultura Sustentable en Magallanes”, donde uno de los expositores fue Eugenio Zamorano, jefe de Acuicultura en Subpesca, quien mostró como contexto que la actividad de la industria en la región representa el 12% de la biomasa total cosechada a nivel nacional, con 130 concesiones autorizadas, el 10% del global de centros de cultivo.

De acuerdo con Zamorano, actualmente existe un crecimiento limitado para la salmonicultura en la región de Magallanes porque no hay áreas disponibles para acuicultura y aparecen nuevos actores que usan el borde costero, además de la importancia de los pueblos originarios como los Kawésqar que ocupan espacios relevantes. Por lo mismo, afirma que, para mantener una industria sustentable en la zona austral, el límite productivo no debería sobrepasar las 150 mil toneladas, con no más de 200 centros de cultivo autorizados para operar. 

A la fecha, el representante de Subpesca aseguró que la industria magallánica del salmón presenta un buen desempeño sanitario y pocos actores, lo que ayuda a la sostenibilidad, en una región extensa, donde el 90% del borde costero tiene protección ambiental y existe una fuerte presión ciudadana para que se mantenga esa condición prístina.

Entonces, con el fin de ser compatible en Magallanes, el llamado de Zamorano fue a instaurar un nuevo estándar para la industria salmonicultora, más exigente en lo sanitario, ambiental y social. A modo de ejemplo, con smolts de origen regional como elemento diferenciador, completando todo el ciclo productivo en el área austral, integrando a la comunidad, dando mano de obra local y a su vez, desarrollando proveedores 100% de la zona.

Expositores del primer módulo en Aquaforum.

Junto con un mayor monitoreo sanitario y ambiental, el jefe de Acuicultura en Subpesca manifestó que deben aplicarse nuevas tecnologías preventivas y el estudio de variables que no sólo incluyan a la columna de agua, sino que también al fondo marino de los centros de salmón, además de la certificación de estructuras de cultivo para evitar escapes. 

La preocupación por la protección de los mamíferos marinos y la biodiversidad magallánica, más el correcto manejo de desechos acuícolas y limpieza de playas, son claves para lograr la sustentabilidad salmonicultora en Magallanes. “El llamado es a una industria proactiva en la región, donde una ley no modifica la realidad. Se debe pasar de la intención a la acción, con un cambio de actitud, pues no todo lo resuelve una normativa”, recalcó Zamorano. 

Inversión

Por su parte, Carlos Odebret, presidente de la Asociación de Salmonicultores de Magallanes, reveló que la industria invertirá US$280 millones para tener todo el ciclo productivo en la región, y afirmó que, entre los objetivos del sector, está impulsar desarrollo de proveedores locales para proyectar la actividad con más pymes y más empleos, encadenarse con la agricultura y, en un plazo que aún es indeterminado, exportar directo desde el aeropuerto de Punta Arenas. 

Asimismo, Odebret admitió que no hay futuro posible para la salmonicultura en Magallanes sin una sana relación con la comunidad, donde existe una creciente desconfianza y una percepción de que la industria es incompatible con la protección ambiental. Frente a esto, llamó a que no se trabaje desde las trincheras, donde algunos son buenos y malos, sino que se busquen acuerdos del sector productivo con pueblos originarios como los Kawésqar.

De hecho, el presidente de la Asociación de Salmonicultores de Magallanes apuntó que la Reserva Nacional Kawésqar “es un espacio donde podemos convivir todos de manera sustentable”. Al mismo tiempo, destacó que casi todos los centros de cultivo que operan en la región austral están en pleno proceso de certificación ASC.

Mientras que Alicia Gallardo, directora nacional de Sernapesca, sostuvo que el enfoque a seguir por la industria del salmón de Magallanes es “Una Salud”, para buscar el equilibrio entre sustentabilidad ambiental y sanitaria y la actividad productiva. Desafíos como el BKD y el aumento relevante de casos de Caligus en la región, son temas a resolver por el sector.