Hoy se vota polémica solicitud indígena que busca administrar gran parte del litoral de Puerto Montt

El ECMPO pedido por la asociación Ngulam Ñuke Lafken, busca la administración de un área de 56.482 hectáreas desde Caleta La Arena hasta el límite con Calbuco, pudiendo afectar a la salmonicultura.
La solicitud de un Espacio Costero Marino de Pueblos Originarios (Ecmpo) que abarca gran parte del litoral de Puerto Montt ha reavivado tensiones entre comunidades indígenas, gremios productivos y autoridades locales.
Este viernes, la Comisión Regional de Uso del Borde Costero (Crubc) de Los Lagos deberá votar la iniciativa presentada por la asociación Ngulam Ñuke Lafken, que busca la administración de un área de 56.482 hectáreas -desde Caleta La Arena hasta el límite con Calbuco-, una extensión que ha sido calificada por distintos sectores como "desproporcionada".
La solicitud, presentada a fines de 2020, ha generado una creciente inquietud entre pescadores artesanales, trabajadores del salmón, gremios del comercio y parlamentarios, que advierten que su eventual aprobación podría alterar significativamente el desarrollo productivo de la capital regional y su borde costero respectivo.
A la sesión programada para este viernes a las 15:00 horas en el Salón Azul del Centro Administrativo Regional se suma una marcha de rechazo convocada desde las 14:00 horas por diversos sindicatos y organizaciones.
Varios actores observan con preocupación el proceso. Alejandro Santibáñez, presidente de la Multisindical de Trabajadores del Salmón, advirtió a El Llanquihue que el alcance de la solicitud podría afectar la estabilidad del empleo en la zona.
"Respetamos su decisión de solicitar esto, porque es parte de la prerrogativa que tienen como pueblo originario, pero creemos que es totalmente una desproporción", señaló. El dirigente agregó que el trámite podría tener consecuencias directas en la gobernanza del borde costero. "Somos muy respetuosos del espíritu de la Ley Lafkenche, pero no se está cumpliendo hoy día. Creemos que puede tener complicaciones mayores con la gobernanza. Ya vemos con una Ecmpo del sector Hornopirén, en la que tanto la industria salmonicultora como los pescadores artesanales están fuera del plan de administración. Son vacíos que ha dejado la ley".
Según Santibáñez, el solo hecho de iniciar la tramitación de una solicitud de este tipo genera un "efecto suspensivo" que puede frenar decisiones en la industria salmonicultora. "Eso puede perjudicar la estabilidad de los trabajadores", advirtió. Y añadió que "una vez otorgado ese permiso, después de un año se conoce el plan de administración. Eso es perjudicial. En cualquier otro tipo de actividades, se exige saber qué se va a hacer con el espacio que se está pidiendo. Acá es al revés".
Aunque dijo respetar los derechos ancestrales, insistió en que "sean mesurados, porque es una total desproporción de un espacio costero para un grupo de personas". Por ello, llamó a "aunar criterios para que todo el borde costero que pueda ser solicitado, tenga la justa armonía para el desarrollo de los pueblos originarios, la pesca artesanal y de la salmonicultura".
El diputado Mauro González, en tanto, manifestó que "le hacemos un llamado a los integrantes de la Comisión Regional de Uso del Borde Costero a rechazar esta solicitud. En especial, a los representantes del gobierno que en las últimas oportunidades han votado a favor. Porque no podemos entregar todo el borde costero en perjuicio de la gran mayoría”.