Benjamín González, CEO y fundador de Greenspot. Foto: Greenspot.

La industria del salmón puede ser ícono de Economía Circular

*Columna de opinión para Salmonexpert de Benjamín González, CEO y fundador de Greenspot. 

Largamente se ha comentado que estamos tarde, que estamos atrasados y que la crisis climática es de tal magnitud que para efectos prácticos ya se hipotecó el futuro de nuestros hijos. Sin embargo, es clave salir del estado de congelamiento e inacción ante esto y mirarlo como una oportunidad. 

Sin duda, hoy es el momento de impulsar iniciativas de Valorización y Reciclaje. Es así como se han generado diversos proyectos -algunos muy mediáticos- en los que vemos a grandes marcas basando su estrategia en ellos, como pilar para su desarrollo en los próximos años, pues el impulso de estas iniciativas a estas alturas, además de ser un deber moral/ético para con el ecosistema, se transformó en un valor importante para el consumidor final, posicionando a los “first movers” frente a los esquivos consumidores.

Es así como han crecido una serie de emprendimientos a lo largo de Chile, y éstos se están asociando con algunos de los líderes a nivel mundial, sin embargo, aún falta mucho por hacer, impulsar y articular en nuestro país, región e industria del salmón.

La conducta de Consumidor Consciente puede y debe invadir nuestro accionar como ciudadanos, colaboradores, empresarios y autoridades, para desde ese lugar, empujar decisiones acertadas en esta materia.

Es así como vemos en la industria salmonicultora nacional el desafío de impulsar en su cadena de valor y proveedores de productos y servicios, la utilización de materiales reciclados e incorporar procesos pensados en Economía Circular y Ecodiseño en toda su cadena productiva. 

Innovar incorporando un porcentaje de plástico reciclado en productos estándar, modificando diseños productivos, impulsando nuevas iniciativas para sus riles, desarrollando e innovando en logística inversa del packing, rechazando productos que no cuenten con posibilidades de reutilización, verificando realmente cuál es el destino final de sus residuos. 

En definitiva, transformarse en un activo demandante de soluciones en Economía Circular, las que, desarrolladas en conjunto, sin duda tienen la posibilidad cierta de transformar una de las industrias más importantes del país como la del salmón en ícono de Economía Circular, valorización y reciclaje.

Las iniciativas y proyectos por lo general han venido desde los emprendimientos/proveedores enfocados en el tema medioambiental y es necesario unirlos con la industria del salmón, de modo que sean trabajados desde su génesis con foco en el proceso y cliente, no al revés, para asegurar más posibilidades de éxito.

Otro de los temas relevantes es colaborar en la masificación del conocimiento y conductas ambientalmente amigables y que poco a poco todos los ciudadanos comprendan por qué es necesario su activa participación, pues la cadena de valorización tiene costos directos que son relevantes y que permiten llegar a productos de alta calidad, desmitificando el eterno debate entre calidad de producto reciclado versus producto virgen. 

Entendiendo que el cuidado del medio ambiente e iniciativas de Economía Circular y Reciclaje no pueden ser iniciativas “neo hippis – capitán planeta”, deben contar con apoyo para comenzar, pero luego deben tener la capacidad de viabilizarse por sí solas.

Por último -y muy importante-, es fundamental que se pueda abrazar este desafío desde un enfoque comunitario y local. Hoy existen diferentes emprendimientos e iniciativas locales en esta materia, que requieren salida para sus productos y servicios, y su efecto es multiplicador. Si se impulsan iniciativas enfocadas en medio ambiente, se impulsa emprendimiento y competencias locales, se reduce el C02 logístico emitido por cada unidad de producto valorizado y se generan oportunidades con beneficio local, en la misma zona en que los residuos son generados.  

En resumen, es una oportunidad única para que la industria del salmón impulse la cultura de Triple Impacto, prefiriendo iniciativas que se hagan cargo de sus residuos con un enfoque "mi residuo, mi problema, mi solución”, impulsando proveedores locales, evaluando procesos productivos para la incorporación de materiales y proyectos circulares provenientes de sus propias zonas de impacto, participando de proyectos desde el corazón de sus negocios como estrategia futura, capacitando y educando al entorno en Cultura Medio Ambiental, y colaborando con emprendimientos locales para la implementación de sus desafíos circulares. 

Tenemos todos los elementos para lograr varios objetivos centrales en estrategia de sustentabilidad… la industria del salmón tiene la palabra….